Brillantes y claros días de verano
Cuan largos y calurosos son,
Ya en el cuerpo sentimos la ardentía
De ese aire pesado y bochornoso.
Digo pesado… y digo bien, pues…
En esas tórridas horas de siesta,
Noches, madrugadas y amaneceres,
Prolongados lapsos de aburrimiento.
No me gusta a mí el verano.
No me gusta no señor,
Comprendo que ha de haberlo,
Pero… más suave, digo yo.
Las vacaciones ya están en marcha,
Poco silencio, tranquilad, paz y calma,
La cocina... no digamos, ya nunca para,
Ollas, vasos, refrescos, helados y cucharas.
Todos tienen vacaciones, todos,
Todos menos yo,
Así es el verano de las madres,
Ya estoy harta vive Dios.
Por tanto reclamar yo quiero,
Vacaciones y una paga,
Y en terminando el verano…
Pongo yo, mi plan en marcha.
La paga… algo impensable,
Pero si unas vacaciones largas,
Charlas diarias con amigas, y…
Alguna excursión viaje o .fiesta.
No pienso yo madrugar,
Mientras todos ya trabajan,
Y a olvidar el verano de mi Córdoba,
Que el invierno pronto pasa.
¡OH! Alegre y claro verano,
Con esos tórridos días,
Que largas se me hacen las horas.
Que largas y que aburridas.
Pues a poco que me lo permita mi bolsillo, iré con mi niña a verte este verano.
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